jueves, 26 de enero de 2012

Bien, bien, bien.

Vuelvo a tener problemas para dormirme. ¿Pero sabes qué? Es porque haces que la realidad sea mejor que cualquier sueño. Así que si tengo que sacrificar una noche soñando un viaje a la Luna, no pasa nada, sé que tu eres capaz de llevarme mucho más lejos. Sí, echaba de menos esto de amar y ser correspondido, gracias por recordarme los sentimientos y los síntomas.

lunes, 23 de enero de 2012

No sé ni porqué me preocupo en elegir bien mis palabras.

Diga lo que diga, haga lo que haga, siempre serán malinterpretadas por alguien
al que no le importan las consecuencias que eso pueda acarrear sobre mí. Por eso quiero dejar esto claro; Soy responsable de lo que digo y hago, no de lo que tu comprendas u oigas decir por ahí.

.

domingo, 22 de enero de 2012

Así que gracias por pretender no verme cada vez que pretendo no verte para evitar un contacto visual miserablemente incómodo que ninguno de los dos desea mantener. 

Que más dará lo que digan los demás si al fin y al cabo esta vida es sólo un juego, un juego con final.


Ensúciate. Empobrece. Desespérate. Se peligrosa. Se romántica. Se productiva. Empieza. Haz algo, LO QUE SEA. Porque, antes de que te des cuenta tendrás cuarenta, hijos, hipoteca y responsabilidades que harán que tu felicidad venga en  segundo lugar. Así que antes del cáncer, antes de los niños, antes de 60 horas de trabajo a la semana, antes de los problemas de espalda, antes de perder el sentido del humor...LUCHA. Lucha y folla y corre y ríe. Ríe, porque cuanto más años tengas menos reirás, así que sí. Para de quejarte y lloriquear, porque eso nunca cambia nada, y nunca lo hará.

lunes, 16 de enero de 2012

{débil}

Veo como todo sigue a mi alrededor, y no hago nada, siempre me digo a mí misma que soy fuerte, pero cada vez se va convirtiendo en una mentira más y más grande...no estoy orgullosa de mis decisiones, lo reconozco, me paso horas y horas, pensando en lo que habría sido mejor, y siempre es lo contrario a lo que he elegido...pero nunca soy capaz de elegir algo que sé que en el futuro sería mejor para mí. Siempre voy a por lo seguro, y siempre pierdo, porque aunque sea seguro, no hay diversión, solo hay sufrimiento. Pero que puedo decir, si esconderme tras una sonrisa es la única opción que me queda y a veces ni si siquiera funciona...

domingo, 15 de enero de 2012

Conversaciones telefónicas-

"Ojalá pudiese estar allí, pequeña...¿Sabes? Sabía que algún día tendría que tratar contigo sobre amar a alguien. Amar a alguien de verdad, pero creía que estaría a tu lado, y podría consolarte mientras lloras, no que estaría en la otra punta del mundo, en África, mientras tú estás en Madrid...Cariño, realmente espero que no hayas sufrido mucho por él, porque el hecho de que mientras que él estaba contigo, pudo llegar a tocar las estrellas, no significa que se mantendrá cerca de la luna sin ti...Y no lo digo simplemente por ser tu padre, porque mientras estaba contigo, tu madre y tu hermana en casa, tú siempre demostraste ser alguien fuerte, que lucha por lo que quiere, y que no se rinde frente a las adversidades. Espero que no hayas cambiado tanto en el tiempo en el que no he estado a vuestro lado, espero que sigas siendo mi pequeña niña, aunque ahora tengas el corazón destrozado. Y espero que no le estés dando demasiada importancia a esto, ya que todo en la vida tiene un principio y un fin...y el fin de algo supone el principio de algo nuevo, algo que seguramente será mucho mejor para ti."
Lo has olvidado, la vida crece entre los matices. 

sábado, 14 de enero de 2012

+Puede sonar muy cursi pero, estoy llegando a un punto que lo que mas feliz me hace es quererte, y mi amor hacia ti, no depende de lo que tu me quieras a mi, eso ha perdido importancia, no se si me explico bien.

Pero ya llegaremos a eso, ¿Vale?

Por ahora quédate con los recuerdos. Recuerda todas las veces que cruzamos nuestras miradas con la intención de contárnoslo todo, y no llegamos a pronunciar ni una mísera palabra. Recuerda como cada instante a tu lado provocaba en mí una sonrisa que poca gente era capaz de accionar. Por favor, recuerda todo. Recuérdame, y mantenme en algún sitio de tu memoria, en el que puedas sacarme cuando las cosas sólo vayan a peor, y necesites a alguien que ilumine tu camino, que te guíe a casa. Porque aunque todo entre nosotros se torció, tú nunca llegaste a perderme. Nadie te querrá nunca como yo, cariño.
Podría ser tu chica. Hablar sobre nuestro futuro como si pudiésemos controlarlo, hacer miles de promesas, besarte escuchando nuestra canción, mirar las puestas de sol o quedarnos despiertos hasta el amanecer. Jugar contigo a tu videojuego preferido. Abrazarte tan fuerte como para quitarte las ganas de pensar en otra cosa que no sea en mí. Dormir contigo. Que mi ropa huela a ti. Y la tuya a mí. Hacerte sonreír. Perdernos juntos. Que me enseñes a jugar a tu deporte favorito. Conversaciones estúpidas a las 2 de la madrugada. Caricias, silencios cómodos. Besos, besos, besos, besos, besos y más besos.
Sí, ojalá pudiese ser tu chica.

Esta es una carta que nunca llegarás a recibir pero por si acaso déjame empezar diciendo que te quiero.

 No he conseguido recoger el valor para decírtelo, porque esto no es valor, esto es más bien desahogo, necesito una salida, una válvula de escape.
Quiero que sepas que me encanta tu pelo, tu forma de vestir, de andar, de sonreír, pero tu mirada es la gran culpable de que mi mundo se pare cada vez que nuestros ojos se encuentran, ojalá no fuese tan cobarde, y esto te lo hubiese dicho antes, antes de los evidentes hechos, antes de que la besases, a ella, no a mi, ojalá fuese valiente. Y no hay día en el que no piense en esa mirada castaña que a veces sin ninguna razón se queda 
fija por unos instantes en mi, espero que entiendas que esto me tiene agarrada en un sueño que no creo que se cumpla, 
pero entonces llego te miro, me miras y todo cambia. No sé si te das cuenta de lo que haces, no sé si sabes que te quiero, y no sé si tu me quieres, esa es la pregunta del millón; por ahora no he encontrado adivino fiable para saber cual será tu respuesta, pero no cabe duda, es un no, dos letras que derrumbarán mi mundo en el segundo que tardes en pronunciarlas, y después comenzar a olvidarte y colocar de nuevo las piezas caídas, pero entonces llego. te miro, me miras y todo cambia. Intento hablar.
Pero es como si mi boca no produjese ningún sonido. Todas las palabras que quiero decirte están fuera de mi alcance, pero a la vez tan cerca. Sinceramente no sé como responder la mayoría de las veces que me hablas. Siento que el corazón me susurra que te diga la verdad, que te diga lo que siento. Pero allí está el cerebro, que me dice que tu no sientes lo mismo y que debería olvidarte. No sé a cuál hacer caso porque ninguno de ellos me termina de convencer. Sí, hay una pequeña posibilidad de que sientas lo mismo, pero la veo ínfima. ¿Entonces que hago? Lo único que estoy consiguiendo es atascarme aún más mientras pienso en ti y tú en ella. Te echo de menos. Ya no es solo porque yo estoy lejos, y aún tardaré en volver; sino porque no existe maravilla en el mundo que mis ojos quieran ver más que tu mirada, una vez más. Y fíjate que he soñado con ella más de una vez pero no me sacia lo suficiente. Ojalá fuera más fácil olvidarte,
borrar de mi mente cada momento que probablemente no significó nada para ti. Cuento los minutos que me quedan en esta tortura, porque no sé nada, solo espero que en el fondo, 
yo aparezca en alguno de tus pensamientos, me pregunto qué piensas cuando escuchas mi nombre. Me pregunto si sientes lo que siento yo al verte. Ya sabes, las supuestas mariposas y todas esas historias. También me pregunto si sigues pensando en ella, o si ya has cambiado de objetivo... En fin, demasiados pensamientos para una sola carta, con un destinatario bastante evidente, pero más bien oculto. Porque me oculto de la realidad, ya que me asusta. Me asusta saber que no me quieres. Me asusta saber que "lo nuestro" (más bien dicho la imagen de ti que creé en mi mente y de la cual me enamoré), nunca podrá ser una realidad.Ni siquiera me atrevo a decir la palabra nosotros.
Porque ya estoy dando por hecho que nunca habrá nada más que una supuesta amistad entre tú y yo. Una amistad que no será mas que una forma de tratar de evadirme de mis inalcanzables deseos: y es que han sido tantas las veces las que he soñado tocar el cielo junto a ti, que lo que más me aterroriza es la idea de que llegue un día en el que te olvide, yo a ti, y tú a mi; que llegue un día en el que tomemos diferentes trayectorias, caminos opuestos y no sea capaz de recordar esa dichosa mirada que tan feliz me ha hecho, el único motivo por el que me encuentro escribiendo estas líneas, este incesante goteo de declaraciones de amor. Esta carta llega a su fin pero siento que ésto no acaba aquí, que existen muchas cosas más que hacen que pase las horas buscándote, que hacen que mis días valgan la pena sólo por acercarme a ti, sólo por una simple sonrisa o por el hecho de que me dirijas la palabra. Podría escribir una infinidad de cosas (esa palabra que a ti tanto te gusta) acerca de lo que significas para mi, pero, duele querer expresar lo que sientes y únicamente poder guardar silencio... porque el corazón no entiende de lógica, de lenguaje, y por más que busco la manera, mi cabeza no encuentra la forma de hacerlo. Pero entonces llego, te miro, me miras y todo cambia. And be sure, that my wasted heart will love you until the end of times.